Hay pocas cosas más frustrantes que comprar un producto y que éste salga malo o no cumpla con lo que prometió. ¿Qué hacer en esos casos?
la Ley del Consumidor resguarda el derecho a adquirir productos de calidad, lo que se traduce en la garantía legal.
La garantía legal es el derecho que tiene todo consumidor o consumidora cuando adquiere un producto nuevo e implica que en un plazo de 3 meses desde su recepción, puede exigir el cambio, la devolución de lo pagado o la reparación, siempre y cuando el producto tenga fallas de calidad atribuibles a la empresa que imposibiliten su uso normal. Por ejemplo, la bicicleta no anda, o el televisor no prende.
- La garantía legal es válida en los siguientes casos:
- Cuando el producto no sirva para el uso al que está destinado y tenga fallas que imposibiliten su uso normal.
- Cuando el producto no tenga las características prometidas o convenidas con la empresa.
- Cuando los componentes del producto no correspondan a lo que dicen las etiquetas.
- Cuando los productos no cumplan con las normas mínimas de seguridad o calidad.
- Cuando después de prestado por primera vez el servicio técnico correspondiente, se mantengan las fallas que impiden el uso normal del producto.
- No es posible ejercer el derecho a garantía cuando el producto no le gustó o le quedó mal la talla.